El topónimo Báscones tiene varias etimologías posibles, si bien lo más probable es que sea de “Bascunes” un vocablo precéltico con significado de montañeses o las de las alturas. Fueron los báscones unos inmigrantes vascos que se instalaron en el siglo IX en tierras reconquistadas, y existiendo en varias provincias españolas topónimos de ese lexema. A lo largo de diversos siglos el Señorío de Báscones de Ojeda fue compartido entre la abadía del monasterio de San Andrés de Arroyo y la casa ducal de Frías.
Tradicionalmente de ha venido contando que en Báscones existieron en su día unas ventas denominadas de San Bartolomé, en las que pasaban la noche los arrieros que trajinaban con sus mercerías por las comarcas del Boedo y la Ojeda. Sus fiestas patronales se celebran el día 24 de Agosto, festividad de “San Bartolo”.
A mediados del siglo XIX contaba el pueblo con 70 casas, otra de ayuntamiento, que servía también como cárcel, escuela de primeras letras, contaba con entre 3 y 4 molinos harineros y otra de aceite de linaza, dedicándose casi todo su vecindario a la preparación y manipulación del lino y fabricaban lienzos que vendían en Valladolid, Burgos, Palencia, etc.
La iglesia parroquial, dedicada a San Bartolomé, es de mampostería, consta de una nave, dividida en tres tramos que se hallan cubiertos por bóvedas de arista y cúpula ciega y rebajada en el crucero. Una puerta adintelada y un pórtico se abren en el lado de la Epístola. En el lado del Evangelio, dos retablos: uno del primer tercio del siglo XVII con una escultura de San Roque; el otro es neoclásico con esculturas de San Antón (XVI), San José con el Niño (XVIII) y Virgen con al Niño (XVI). El retablo mayor del Presbiterio es del siglo XVIII con escultura San Bartolomé (XV), el martirio de ese santo y Cristo, estos dos del siglo XVIII. En el lado de la Epístola, un retablo neoclásico con una pintura de la Inmaculada (XVIII) y una escultura de la Magdalena de ese mismo siglo. Además, otro retablo, este rococó, con una pintura de las Ánimas. En la Sacristía, esculturas de la Virgen y de San Martín, ambas del siglo XVI.
Báscones de Ojeda contaba con 281 habitantes a mediados del siglo XIV, con 279 en 1900, con 400 en 1930, con 475 en 1960 y 193 en 2006.